Baires Para Todos

La herencia de Andy Deutsch, exdueño de LAPA: millones, tragedia y un giro inesperado

La sucesión del empresario, fallecido en un accidente aéreo, es motivo de disputa. Bienes ocultos, hijos enfrentados y el insólito vínculo con Pampita. 

Gustavo Andy Deutsch fue uno de los empresarios más poderosos de la Argentina hasta que una de las peores tragedias aéreas del país puso en jaque su fortuna. El 31 de agosto de 1999 un avión de LAPA, empresa aeronáutica de su propiedad, falló en su despegue y terminó rompiendo la barrera de contención de Aeroparque, cruzó la avenida Costanera, a su paso arrolló un vehículo y terminó con la vida de sus dos ocupantes más un total de 65 víctimas fatales entre pasajeros y tripulantes.


Paradoja del destino, 15 años después, el 14 de septiembre de 2014,  mientras piloteaba su avión desde su campo de Lincoln hacia Aeroparque acompañado de su esposa, Graciela Villarruel, el Beech E 300 se precipitó sobre el barrio privado Nordelta, dañando varias casas deshabitadas y cobrándose la vida del empresario y su esposa. Su deceso marcó el inicio de una guerra por la sucesión de una fortuna valuada en más de 1000 millones de dólares.

Todos los detalles de la pelea por la herencia de Deutsch

A nueve años de aquél fatídico accidente, las disputas por la herencia multimillonaria no cesan. Los hermanos de Villarruel y un hijo extramatrimonial de Deutsch, que al momento del accidente era recién nacido, tras haber sido aceptados como nuevos querellantes, reclaman la parte que les corresponde de la acaudalada herencia.

Los hijos mayores de Deutsch, sus nietos y uno de sus yernos, por la otra parte, están siendo investigados por ocultamiento de fondos, vaciamiento de cuentas y ventas fraudulentas de empresas con el único objetivo de no brindar la porción que le correspondería al menor y a los hermanos de Villarruel. 


Entre las administraciones dudosas que están siendo investigadas, figura el Trust Mystere, con un activo de alrededor de 300 millones de dólares, venta de acciones de “Tia” y “TA TA”, concretadas con el Grupo de Narvaez por una cifra cercana a los 200 millones de dólares. 

También se está intentando esclarecer el desprendimiento accionario fraudulento de activos en las empresas Almont y Dribel. Otros de los bienes que están en la mira son los correspondientes a la explotación y remate de los bienes de uno de los campos ubicados en Lincoln de los cuales Deutsch dispuso hasta el momento de su muerte por medio del control de una de sus sociedades y que respondían a su patrimonio.
Según lo aportado a la causa por los hermanos de Villarruel, los hijos mayores del empresario se habrían apoderado de valiosos objetos personales que la pareja tenía en uno de sus campos, en Lincoln, de haber invadido las propiedades que habitaba la pareja tanto el hogar conyugal de Argentina como en el de Pensilvania, Estados Unidos.
En la causa también fue incorporada la petición de los hermanos de que reconozcan la participación de su hermana fallecida en varios Trusts en el exterior y sociedades en el país. 

El insólito vínculo de los Deustch con Pampita 

Entre las propiedades en pugna, hay un triplex de lujo que hasta hace poco alquilaba Carolina “Pampita” Ardohain. 
La administración de los bienes del magnate habría quedado en manos de sus hijos mayores quienes aparentemente manejaron los mismos a su antojo.
Ahora los Villarruel, tras una ardua lucha judicial, lograron ser incorporados a la causa como querellantes. La fortuna en disputa asciende a la friolera de los mil millones de dólares. 
Deutsch tuvo, de su matrimonio con Olga Kozak, cuatro hijos: Allison, Frederick, Julia y Katherine y son ellos, sus nietos y el esposo de Allison, los acusados por realizar diferentes maniobras para que el menor no reciba lo que le corresponde y lo mismo suceda con los hermanos de la mujer fallecida. Actualmente están siendo investigados por administración fraudulenta y por defraudación y ya fueron procesados en una de las causas en la que habrían intentado ocultar una fortuna superior a los 600 millones de dólares.

Con los avances en la causa y la incorporación de los hermanos de Villarruel, se va esclareciendo un panorama que ya lleva varios años pero que aún tiene mucho por delante ya que es muy difícil saber exactamente cuál es la cifra final correspondiente a los bienes heredables ya que hay muchas sociedades en el exterior controladas por fideicomisos y testaferros. 

Por Diego Esteves-Revista Caras