Baires Para Todos

Javier Milei, ¿aguanta o queda en la nada?

“Los libertarios llegaron para quedarse: seguirán consiguiendo por arriba del 10 por ciento de los votos”. “No, no, se van a diluir después de las PASO y casi todos terminaran votando a Juntos por el Cambio”. Los consultores en campañas electorales discrepan entre sí en base a esos dos diagnósticos.

“Los libertarios ofician de onda parásita de la onda portadora que es Juntos por el Cambio -analiza Artemio López-. Sirvieron para instalar una agenda neoliberal ultraconservadora en el debate público y a pesar de su permanencia en las encuestas serán absorbidos por la polarización de manera significativa. El desencuentro entre ciudadanía y política debe escalar aún más para que estas alternativas ganen volumen suficiente para romper una estructura polarizada”.

Hay una coincidencia bastante generalizada en un punto: Javier Milei dejó de ser porteño, su influencia se nacionalizó. “Después de una buena elección legislativa en CABA en el 2021, nacionalizó durante el 2022 su espacio político –analiza Federico Aurelio–. Con algunos altibajos ha oscilado en todo el 2022 entre el 15 y el 22 por ciento de intención de voto en una elección primaria. Este caudal electoral tiene alta probabilidad de sostenerlo si continúa representando el voto anti-dirigencia tradicional”.

Hugo Haime tiene una mirada más internacional. “Los libertarios en sus variadas expresiones han crecido en todo el mundo. Y lo han hecho como un modo de expresar una revolución de valores en contra de lo que denominan keynesianismo, feminismo, igualitarismo, etc., etc. En un sentido son conservadores, en otro sentido son rebeldes. Por eso Milei puede representar una especie de liberal/anarquismo. Es posible que una porción de su electorado o vote en blanco o se abstenga en una probable segunda vuelta entre Cambiemos y el Frente de Todos”.

Santiago Giorgetta es de los que piensan que pueden diluirse. “El espacio de Milei tiene muchas coincidencias con el espacio opositor y casi nada con el oficialismo y en el caso que produzca una polarización extrema a lo largo del año, lo cual es muy posible, tal vez se diluya luego de las PASO y termine absorbido por la polarización. Eso no será una sorpresa”. 

“Los libertarios van a persistir, lamentablemente -diagnostica Raúl Timerman– . Los que pueden hacer desaparecer el espacio son ellos mismos. Se encargan de expulsar a los más inteligentes. Hay un fenómeno a tener en cuenta. Antes eran un libertario por cinco de Juntos por el Cambio. Ahora son 1,3 libertarios por 1,7 de Juntos por el Cambio. Casi parejos. En ballotage dos de cada tres se van a Juntos. Mal escenario para el oficialismo”. 

Por Raúl Kollmann – Página/12