Baires Para Todos

Era bailarina clásica y quería entrar al Colón, pero se convirtió en la primera francotiradora del país

Abigail Serrano estudió ballet y deseaba subirse al escenario del teatro Colón. Hoy es la única tiradora de las Fuerzas Armadas y, hasta donde ella sabe, de la Argentina.

Ella es Abigail Serrano, una joven jujeña de 33 años con una particular profesión: es la primera y única francotiradora de las Fuerzas Armadas y, hasta donde ella, sabe de la Argentina.

Lejos de lo que hoy es su vida, Abigail estudió danzas clásicas y desde chiquita soñaba con bailar en el teatro Colón y en los mejores teatros del mundo hasta que, buscando conocer el mar y obtener algo de dinero para poder seguir estudiando, ingresó en la Armada Argentina.

En la base naval de Puerto Belgrano, en Punta Alta, Abigail comenzó su carrera naval que la llevó a descubrir esta nueva pasión. Poco a poco se fue instruyendo para ser francotiradora o, como lo llaman en la fuerza, tiradora especial.

“Vi una película, donde habla de la vida de una de las primeras francotiradoras mujeres y me encantó. Hice el curso y allí mis instructores me dijeron ´si se recibe, va a ser la única mujer tiradora de las fuerzas armadas´ y yo lo sentí como un peso, sentía que no podía defraudar a las mujeres”, dice esta joven nacida en San Salvador de Jujuy.

A primera vista, estas dos disciplinas parecen muy diferentes, pero Abigail destaca que tienen mucho en común: la disciplina y el esfuerzo que aprendió durante horas de entrenamiento en la sala de ballet fueron dos valores importantes para transitar la carrera naval.

Además, agrega: “El ballet tiene mucho de relajación y de estar tranquilo, el estar atento, consciente. Con el tiro pasa lo mismo, cuando estás en el piso esperando las órdenes para disparar tenés que estar consciente, concentrado y relajado”.

Abigail Serrano estudió toda su vida danzas clásicas y hoy es francotiradora. (Foto: captura de video).
Abigail Serrano estudió toda su vida danzas clásicas y hoy es francotiradora. (Foto: captura de video).

“La danza me trajo hasta acá, porque este era mi lugar”, dice convencida Abigail, quien además participó en misiones especiales de paz con los Cascos Azules de Naciones Unidas. Hoy, además de ser la única francotiradora de la fuerza, es instructora en el Comando Instrucción y Evaluación de la Infantería de Marina.

Cuenta Abigail que nunca sintió limitaciones por ser mujer y que recibe el mismo trato que los hombres. Tampoco sintió que ser mujer podía ser un obstáculo y hoy abre un camino enorme para todas aquellas que quieran animarse.

“Que no se te pase la vida tratando de vivir otra”, dice convencida Abigail.

Fuente: TN