El Gabinete de Kicillof, en alerta por la carta de Cristina Kirchner: arde la interna en el PJ. Los intendentes aliados al gobernador interpretaron la misiva como una señal de ruptura. Es incierta la continuidad de ministros kirchneristas
Desde su prisión domiciliaria, Cristina Kirchner difundió una nueva carta pública en la que atribuyó la derrota del peronismo en la Provincia de Buenos Aires al gobernador Axel Kicillof. Según la exmandataria, el desdoblamiento de las elecciones fue un “error político” que dividió esfuerzos y debilitó la estrategia del oficialismo en el principal distrito electoral del país.
Cristina recordó que en abril había manifestado su desacuerdo con la decisión de separar los comicios bonaerenses de las elecciones nacionales y consideró que esa estrategia perjudicó al peronismo. “Fue un error dividir los esfuerzos en dos elecciones separadas por apenas 49 días”, sostuvo.
La expresidenta comparó los resultados obtenidos por el oficialismo en Buenos Aires con los de otras provincias gobernadas por dirigentes del Partido Justicialista. “Todos los gobernadores peronistas —Sergio Ziliotto en La Pampa, Ricardo Quintela en La Rioja, Raúl Jalil en Catamarca, Osvaldo Jaldo en Tucumán y Gildo Insfrán en Formosa— ganaron en estas elecciones parlamentarias”, señaló. En ese contexto, calificó lo sucedido en la provincia como “una excepción” y lo atribuyó a “una equivocación en la estrategia electoral”.
El Gabinete de Axel Kicillof, en alerta: ¿se rompe el PJ?
La misiva publicada por la líder de Partido Justicialista impactó de lleno en las primeras filas de la gestión del gobernador bonaerense. El mensaje generó malestar y tensión en el Gabinete de Kicillof y sus intendentes aliados.
“Sin son tan leales, que se vayan, pero no va a suceder“, manifestaron cerca del gobernador de la provincia de Buenos Aires.
El mensaje de CFK llega horas antes de que el propio Kicillof se reúna con jefes comunales integrantes del Movimiento Derecho al Futuro, donde, según trascendió, le pedirían que ratifique su divorcio político del kirchnerismo duro.
En principio, componen ese grupo Juan Martín Mena (Justicia y Derechos Humanos), Nicolás Kreplak (Salud), Daniela Vilar (Ambiente), Florencia Saintout (Instituto Cultural), Marina Moretti (Instituto de Previsión Social), Homero Giles (IOMA).
Se trata de un momento delicado para Kicillof que, además de sufrir un batacazo electoral en la Provincia, fue dejado de lado en la reunión de gobernadores que convocó Javier Milei este jueves.
Análisis del resultado electoral y la reacción del electorado
Cristina Kirchner analizó que la diferencia de “casi 14 puntos” entre el oficialismo y la oposición en la elección bonaerense del 7 de septiembre actuó como una instancia previa similar a unas primarias o un balotaje. Según su lectura, ese escenario “permitió reagrupar el voto antiperonista” en la elección nacional del 26 de octubre.
La exmandataria también vinculó el resultado con lo que denominó “el miedo a la crisis política y económica”. Afirmó que parte del electorado votó condicionado por la preocupación ante una posible desestabilización. “Algunos creyeron que si el gobierno perdía la elección de medio término, se caía”, expresó.
Cristina mencionó que el proceso electoral se desarrolló “en el marco de una escalada del dólar, el aumento del riesgo país y la falta de divisas”. Además, recordó declaraciones del expresidente estadounidense Donald Trump, quien había asegurado que la asistencia del Tesoro de Estados Unidos —a través de la compra de pesos argentinos— dependía del resultado de los comicios.
Según la exjefa de Estado, ese mensaje “instaló temor” en parte del electorado. “Con la amenaza de que todo iba a explotar, lograron una sobreestimulación emocional en una parte de la sociedad”, señaló.
Cuestionamientos a la economía y la relación con Estados Unidos
En otro tramo de su carta, Cristina Kirchner planteó su preocupación por la participación del Tesoro estadounidense en la economía local y el nivel de endeudamiento externo. “El valor del dólar es el que guía, alarma o fulmina a la economía bimonetaria argentina, que, endeudada como nunca en la historia, ha sumado un nuevo acreedor: el Tesoro de los Estados Unidos”, expresó.
La exmandataria advirtió sobre el riesgo de depender de ese vínculo financiero. “Los argentinos compran dólares y los estadounidenses compran pesos. ¿Qué puede salir mal?“, ironizó, en referencia al esquema de intercambio que —según explicó— sostiene parte del sistema monetario argentino.
Cristina relativizó además la magnitud del triunfo del oficialismo nacional al señalar que “desde 1983, todos los presidentes, salvo Fernando de la Rúa y Alberto Fernández, ganaron la primera elección parlamentaria posterior al inicio de su mandato”. En esa línea, destacó que el peronismo obtuvo el 35% de los votos a nivel nacional, frente al 40% alcanzado por La Libertad Avanza, y mencionó el crecimiento del ausentismo y la “insatisfacción democrática” como factores del escenario político actual.
Denuncia de persecución judicial y crítica a la Corte Suprema
Kirchner reiteró sus denuncias sobre lo que considera una persecución judicial y mediática. Afirmó que, tras las elecciones, la Corte Suprema sobreseyó a figuras como Mauricio Macri, Luis Caputo, Federico Sturzenegger y Javier Milei, mientras ratificó condenas contra dirigentes vinculados al peronismo.
Entre esos casos mencionó el de Martín Sabbatella, condenado por la aplicación de la Ley de Medios, y el de Guillermo Moreno, inhabilitado para ocupar cargos públicos. “Se busca disciplinar a los que defienden los intereses nacionales”, sostuvo.
En su diagnóstico, estas decisiones forman parte de una “ofensiva” dirigida a “romper el peronismo y el campo nacional y popular”. “Transformar la Argentina en una factoría y quebrar su organización social y política requiere algo más que ganarle una elección”, afirmó, anticipando que, según su visión, se utilizarán todos los recursos posibles para alcanzar ese objetivo.
Llamado a la unidad política y mensaje final
En el tramo final del texto, Cristina Kirchner planteó que la “dirigencia política, sindical y social en la Argentina está en libertad condicional”, en alusión a las causas judiciales abiertas contra distintos referentes. Consideró que el desafío del peronismo es mantener la cohesión interna y fortalecer la militancia con una “claridad estratégica y programática” orientada al desarrollo productivo y la generación de empleo.
“Necesitamos dirigentes con cabeza, corazón y coraje”, afirmó. El cierre de su mensaje incluyó una apelación a la unidad y a la organización política, y una cita histórica de Winston Churchill: “Estudie historia, estudie historia, estudie historia”.
Con esta carta, la exmandataria volvió a intervenir en el debate interno del peronismo tras la derrota electoral en Buenos Aires, buscando instalar una lectura política sobre las causas del resultado y el futuro del espacio. Su mensaje, difundido desde su lugar de detención domiciliaria en el domicilio de San José 1111, volvió a poner en discusión la estrategia electoral de 2025 y el rol de los distintos sectores dentro del oficialismo.