Como presidente de la Mutual del Círculo de Legisladores de la Nación, funcionario público, pero también como matriculado del Colegio Público de Abogados, y ciudadano argentino, me siento en la obligación de expresar mi profunda preocupación ante la propuesta de otorgar al Poder Ejecutivo atribuciones extraordinarias sin el debido control del Congreso. En tiempos de crisis, la tentación de delegar poderes es comprensible, pero no podemos perder de vista los principios fundamentales que nos guían como nación.
Juan Bautista Alberdi, el pensador detrás de nuestra Constitución de 1853, nos dejó una advertencia clara y atemporal: «Dar al Poder Ejecutivo todo el poder posible, pero dádsela por medio de una Constitución. Lo peor del despotismo no es su fuerza, sino su inconsecuencia, y solo la Constitución es inmutable». Estas palabras resuenan con especial relevancia en el contexto actual.
La Constitución de 1853 es la piedra angular de nuestra democracia, y su espíritu liberal es la base de nuestra identidad como nación. Alberdi, considerado uno de los padres fundadores de la República Argentina, sería el primero en oponerse a la idea de otorgar al Gobierno poderes ilimitados bajo el pretexto de la emergencia.
La esencia de nuestras instituciones democráticas radica en el equilibrio de poderes y en la existencia de controles efectivos para evitar cualquier forma de arbitrariedad. La delegación legislativa propuesta va en contra de estos principios, socavando la base misma de nuestra república.
Entendemos la importancia de actuar con celeridad frente a desafíos urgentes, pero no podemos permitir que la premura nos lleve a sacrificar los principios fundamentales que nos definen como sociedad. La inmutabilidad de la Constitución es nuestra salvaguarda contra el despotismo y la inconsecuencia que Alberdi tan sabiamente señaló.
En momentos como estos, es crucial recordar que la fortaleza de una democracia se mide por su capacidad para resistir las tentaciones autoritarias y para mantenerse firme en la defensa de los derechos y libertades individuales. La Mutual Círculo de Legisladores de la Nación aboga por un enfoque equilibrado que permita enfrentar los desafíos actuales sin comprometer los cimientos de nuestra república.
Hay que abogar por un enfoque equilibrado que permita enfrentar los desafíos actuales sin comprometer los cimientos de nuestra república y reflexionar profundamente sobre la propuesta en cuestión y a defender con determinación la vigencia de nuestra Constitución y la preservación de la esencia democrática que nos define como argentinos. Además, el ataque al federalismo, a sus representantes, los mandatarios provinciales, y a su pueblo, ha sido permanente, y es por ello, además, que no se le pueden dar superpoderes y semejante delegación legislativa a quien amenaza así a nuestras Provincias, base de nuestro sistema federal.
NM