La diputada liberataria se burló de Antonio Becerra, el fotógrafo agregido en la represión a jubilados. Se trata del mismo fotoreportero que fue intimidado por Santiago Caputo.
Tras una nueva represión a jubilados en el Congreso, la diputada libertaria Lilia Lemoine se burló de la agresión sufrida por el fotógrafo Antonio Becerra, quien recibió gas pimienta directamente en los ojos mientras cubría la manifestación. Se trata del fotoreportero que había sido intimidado por Santiago Caputo luego de tomar una imagen del asesor presidencial.
El periodista de Tiempo Argentino fue asistido por personal médico luego de ser alcanzado por los gases a pensar de llegar una máscara protectora. El joven había sido blanco de las agresiones del oficialismo, luego de tomar una fotografía de Santiago Caputo en la previa del debate entre candidatos legislativos porteño.
En ese contexto, la polémica legisladora oficialista justificó la represión y buscó sembrar dudas sobre la tarea del fotógrafo. “El periodista que increpó a Santi Caputo en Diputados hoy interceptó el gas pimienta de un policía con la cara así que van a inventar que fue a propósito…”, expresó Leomine en su cuenta de X.

Su comentario fue repudiado por varios usuarios de Twitter entre ellos la cuenta oficial de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI). “Parecería joda si no fuera que se parece bastante a lo que dicen los policías del gatillo fácil sobre sus víctimas: ‘el pibe cruzó la nuca en el trayecto de la bala’”, señalaron desde la organización que lidera María del Carmen Verdú.

La intimidación de Santiago Caputo a Antonio Becerra
Antonio Becerra se hizo conocido luego de tomar una fotografía en primer plano de Santiago Caputo y ser intimidado por el principal asesor de Javier Milei. El episodio ocurrió a fines de abril en la previa del debate de candidatos de la Ciudad de Buenos Aires.
En ese momento, mientras Becerra realizaba su trabajo y enfocaba con su cámara a Caputo, el consultor político tomó la credencial que colgaba del cuello reportero y le sacó una foto con su celular. La secuencia fue registrada por otros fotógrafos presentes en el lugar y fue considerada como un intento de amedrentar a la prensa.
Este acto intimidatorio fue repudiado por el Foro de Periodismo Argentino (FOPEA), la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA) y el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba), entre otras organizaciones.