El gobernador habló en la previa de la llegada de Milei a la PBA
Dijo en La Plata que los discursos de odio pueden desencadenar incluso en actos de racismo. Volvió a reclamar por recursos.
Horas antes de que el presidente Javier Milei desembarcara en La Plata para dar inicio a la campaña bonaerense de La Libertad Avanza, el gobernador Axel Kicillof le dejó un mensaje sobre los discursos de odio, el crecimiento de la violencia y los recortes presupuestarios en materia de seguridad. Fue también en la capital provincial, donde encabezó la apertura de un seminario internacional de seguridad que se llevó adelante en la UNLP, junto al ministro de Seguridad, Javier Alonso y el intendente de La Plata, Julio Alak.
El gobernador volvió a apuntar a Milei al señalar que “robó” los fondos de seguridad destinados al área y lanzó: “La motosierra no resuelve la seguridad”. A ello, sumó que “se dice que las políticas quedan bien cuando se anuncian, pero tienen que estar reflejadas en los presupuestos; Milei nos cortó fondos y obvio que nos faltan porque para seguir incrementando los logros necesitamos de esos recursos”.
“Una de las cuestiones más bastardeadas en materia de discurso público y político es la seguridad”, dijo Kicillof ante representantes y expertos de países de América Latina y agregó que, a nivel internacional, “ahora nos enfrentamos a lo desconocido”. “El presidente de una de las potencias del mundo, que es Estados Unidos, ya no brega por el comercio internacional y eso marca el fin de una era”, dijo y utilizó el hecho para dar cuenta de “la inestabilidad que domina el panorama internacional”.
“Es difícil la cuestión de la seguridad en una situación de incertidumbre y de cambios. En Europa hay temor de una tercera guerra mundial, una guerra nuclear de la que se habla permanentemente. El mundo está en peligro”, aseguró.
Ya en el plano local, Kicillof cuestionó que “los discursos de odio emanan de las más altas autoridades del país” y aseguró que “no es gratuito que alguien se pase, desde la Presidencia o el Congreso Nacional, su día pidiendo que se odie a otros”.
“Si lo que se predica es la erradicación del otro por pensar distinto o por ser de otra nacionalidad. ¿Cuánto falta para que eso desencadene hechos de xenofobia o racismo? Vengo a decirle al Gobierno nacional que pare con esta política de persecución”, exigió el gobernador, quien sostuvo que “esto no agota los problemas de seguridad pero los agrava”.
En otro plano, y tras subrayar que la legislación provincial no avala al Gobierno bonaerense a intervenir en materia de narcotráfico sino solo en casos de narcomenudeo, Kicillof puso en valor que hay en la jurisdicción “una política de estado vinculada a la seguridad” aunque la decisión fue no hacer “demasiada propaganda de los cambios que implementamos”.
“Me atrevo a decir que transformamos completamente el abordaje desde lo institucional, lo económico y la formación en seguridad. Había un grado de anarquía inmenso en la gestión que me precedió”, lanzó para luego reforzar: “no hicimos promoción de lo hecho porque nos propusimos hacer un trabajo serio y, si es posible, permanente”.
El gobernador dijo que para enfrentar los problemas de seguridad “no alcanza” con el Ejecutivo y pidió “coordinar con los otros dos poderes del Estado de manera permanente y dinámica”. “Sería bueno que en toda la provincia trabajemos para que haya una mesa permanente entre el municipio, el Ministerio de Seguridad y los representantes del Poder Judicial de cada región”, agregó valorando el caso de La Plata donde ese esquema funciona. “Creo que hay que reconocer que la falta de coordinación es un fracaso de todos”, dijo.
Asimismo, recordó que cuando accedió a la Gobernación “esta coordinación era nula” y puso en valor “estar avanzando en la institucionalización de las mesas de coordinan el Ejecutivo con el Judicial, pero que requieren del Legislativo como producto de la dinámica de las transformaciones, de las necesidades, del análisis” y recriminó que hace unos años presentó un proyecto de ley para hacer cambios en la dinámica de funcionamiento de la Policía bonaerense “y no ha sido aprobado”.
“El peor modo de trabajo que se me ocurre es echarse culpas ante cada caso”, reclamó para luego sostener que “un tema tan delicado, sensible e importante como la seguridad ciudadana no debería ser materia de debates tan poco serios y simplones”.
En el acto, el intendente de Berisso, Fabián Cagliardi, dijo a Buenos Aires/12 que “se hizo cargo el gobernador de la seguridad de la provincia” y destacó el aporte del Fondo de Seguridad, nuevos patrulleros cero kilómetros y motos. “Nos viene dando muchos resultados, hemos esclarecido muchos hechos, la inseguridad fue bajando mucho en todos los municipios y la verdad que tiene que ver con ese trabajo en conjunto que venimos llevando”, agregó.
“Milei es el presidente y puede ir donde se le ocurra, pero veremos cómo lo toma el vecino y cómo lo toma la gente con esta situación que hoy estamos viviendo, en un país que se endeudó más de 107 millones de dólares en este año y medio y la verdad que no vino ni una sola obra pública a ningún municipio, se cortaron todos los programas, no sabemos dónde está ese dinero”, dijo en relación a la visita de Milei a La Plata.
“Creo que los vecinos tienen que tomar conciencia de todo eso y de lo que están pasando nuestros abuelos, lo que está pasando con el PAMI que depende de él y lo que está pasando con el ANSES que depende de él y esta joda financiera que viene llevando adelante este gobierno”, cerró.

Por María Belén Robledo-Página/12