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Scioli no abandona el sueño presidencial

En plena temporada, el embajador argentino en Brasil usa la playa para medir su popularidad. Si Fernández desiste de jugar en 2023, él se anota.

Estuvo cerca una vez y no abandona su sueño de volver a pelear por la Presidencia. Por eso, de tanto en tanto, Daniel Scioli pisa suelo argentino, activa reuniones y contactos, se muestra en público y enciende el termómetro para ver qué tan vigentes están sus chances.

Los resultados más fidedignos, dice, no los arrojan las encuestas que hacen las grandes consultoras. El sondeo preferido de Scioli es el Bristol test, una aparición en la playa más popular de Mar del Plata, en plena temporada, para tener de primera mano la reacción de la ciudadanía y testear el humor social.

Eso fue lo que hizo el embajador argentino en Brasil la primera semana del año. En su entorno dicen que le fue “muy bien”. Corrió, se metió al mar, recibió saludos, algunos pedidos de fotos y hasta la frase de un nostálgico que deseó retroceder el tiempo al ballotage 2015. “Eras vos, Daniel”, le dijo.  

Juran que no escuchó insultos ni ningún reclamo. Y que la buena recepción le confirmó que, si quisiera, podría embarcarse otra vez en una campaña presidencial. “Si va de nuevo Alberto (Fernández), eso está descartado obviamente”, explican cerca del embajador. El Presidente ya dejó en claro que tiene voluntad de buscar la reelección y se mostró dispuesto a habilitar una PASO en caso de que algún dirigente se anime a darle la interna. No es el caso de Scioli, deseoso de tener otra chance, pero que solo se animaría a dar el paso si Fernández se bajara. El embajador mantiene una relación muy cercana con el jefe de Estado. En cambio, casi no tiene diálogo con Cristina Fernández de Kirchner.  

Por lo pronto, el exvicepresidente trabaja para mostrar su gestión en Brasil, el lugar que usó para reposicionarse en la política local. En Mar del Plata, Scioli mantuvo varias reuniones con empresarios que buscan potenciar las exportaciones a Brasil, recorrió Marechiare, una empresa con 45 años de historia que produce conservas de pescado en Mar del Plata y busca llegar al mercado brasileño, y visitó el Astillero SPI, donde se construye el barco langostinero más grande de Sudamérica.

Las empresas le plantearon las dificultades que encuentran a la hora de exportar. Los temas fueron costos muy elevados de estadía en la frontera debido a procesos burocráticos, dificultades para contratar camiones y algunas cuestiones referidas al funcionamiento del SENASA, entre otros.

Tras su paso por Mar del Plata, el embajador viajó a Buenos Aires donde se quedará esta semana. En su agenda figura  la preparación de la visita a Brasil del secretario de Energía, Darío Martínez, que se concretaría entre enero y febrero para avanzar en la construcción del gasoducto entre Vaca Muerta y Brasil. Según Scioli, será “la obra binacional más importante de la historia”, y podría concretarse hacia fines de 2023. 

En tanto, el exgobernador de la provincia de Buenos Aires elige no opinar en público sobre la publicación del video que muestra a exfuncionarios de María Eugenia Vidal reunidos con exagentes de la Agencia Federa de Inteligencia (AFI), en el que se refieren al armado de causas judiciales contra dirigentes gremiales. Scioli dejó la vocería sobre el tema en cabeza de su exjefe de Gabinete, Alberto Pérez, que dijo que Vidal “debería renunciar a su banca si se certifica la veracidad del video, porque es imposible que desconociera lo que estaba pasando”.