Baires Para Todos

La misión de Soria

El rionegrino llega para dar un golpe de timón a una cartera caliente que estará en la mira de los Fernández. Objetivo Casal. La candidatura de Rafecas, firme.

Este lunes, después de que la Cámara de Diputados le aceptara la renuncia a su banca en la inusual sesión de este sábado, el rionegrino Martín Soria se sentará en la silla del Ministerio de Justicia con el objetivo de conseguir un primer resultado rápido que muestre un golpe de timón en la conducción de la cartera: lograr el pronto desplazamiento del procurador interino, Eduardo Casal.

Soria asumirá en el Ministerio que dejó vacante Marcela Losardo a principios de marzo, luego de que el presidente Alberto Fernández confirmara su alejamiento porque se sentía “agobiada”. Con el recambio, la Casa Rosada ya envió una primera señal al Poder Judicial.

“Alberto realmente cree que hay que hacer cambios en la Justicia. Intentó por las buenas, pero recibió muchos golpes”, le dijo a Letra P un ministro del Gabinete cercano al Presidente, que afirma que Soria buscará dar “un golpe de efecto” veloz en las primeras semanas de su gestión, que será forzar el paso al costado de Casal. “Hay que mostrar otra impronta”, sintetiza.

Soria ya habló sobre el tema con algunos de sus futuros compañeros de gabinete y también con senadores y diputados del Frente de Todos, que empujarán desde sus bancas los nuevos proyectos que enviará el Poder Ejecutivo. Les adelantó que habrá bastante movimiento. Además, buscará la sanción de la ley de reforma del Ministerio Público y la reforma judicial, los dos proyectos que aprobó el Senado y quedaron luego trabados en Diputados. En el ala cristinista del Congreso se quejaron durante meses de que Losardo no les había “puesto el cuerpo” para conseguir la sanción. En ese punto se notará el primer cambio.

“Hay temas que no se habían trabajado fuerte. Ahora se hará”, afirma un funcionario que sigue de cerca las cuestiones judiciales. “Martín le va a meter mucho laburo. Va a intentar que tratemos los proyectos pendientes”, asegura un diputado del Frente de Todos. En el Senado también hay expectativas de avance.

La prioridad será la ley de reforma del Ministerio Público, que modifica las mayorías para la designación y la remoción del procurador general. Mientras la ley vigente requiere dos tercios de los miembros presentes del Senado, el proyecto dispone que se lo pueda elegir por mayoría absoluta de los miembros presentes. Un número más alcanzable para el oficialismo, que no consiguió los dos tercios para nombrar al candidato del Presidente, el juez federal Daniel Rafecas. En tanto, el mecanismo de desplazamiento también se modifica. En la ley actual se remite al proceso de juicio político establecido en la Constitución Nacional, donde la Cámara de Diputados, por mayoría especial de dos tercios de sus miembros, acusa al procurador ante el Senado, que lo puede remover, también con una mayoría de dos tercios de los presentes. El proyecto propone que Diputados pueda promover el juicio político con mayoría simple.

En paralelo, el oficialismo ejerce presión sobre Casal, contra quien pesan más de doce pedidos de juicio político. El Frente de Todos lo sacude de manera permanente en la Comisión Bicameral de Control y Seguimiento del Ministerio Público y Fiscal, que preside el senador Martín Doñate y analiza sanciones disciplinarias. Casal asumió interinamente la Procuración en 2017, tras la salida de Alejandra Gils Carbó. Acorralada por el macrismo, la exprocuradora tuvo que renunciar dos semanas después de que el diario Clarín publicara el celular de su hija, que recibió cientos de amenazas. Más tarde, Mauricio Macri intentó nombrar a una nueva procuradora, Inés Weinberg de Roca –que el año pasado fue convocada por Fernández para integrar el comité de expertos que propuso reformas a la Corte y el Ministerio Público– pero nunca consiguió los dos tercios que fijaba la ley.

El mismo escollo encontró Fernández cuando propuso como procurador a Rafecas. El oficialismo confía en que logrará nombrarlo con la nueva ley, pese a las especulaciones sobre si Rafecas seguiría siendo el candidato para el cargo. “No hay ningún cambio, el candidato del Presidente es Rafecas”, le confirmó a Letra P un estrecho colaborador de Fernández. En la Casa Rosada creen que conseguirán los votos que necesitan para destrabar la aprobación de la ley, pese a que algunos aliados, como el diputado Luis Di Giácomo, pusieron el grito en el cielo con el nombramiento de su comprovinciano Soria. Sin embargo, hay “otras conversaciones en marcha y aceitadas”.

En Casa Rosada afirman que Soria seguirá “la misma línea” que Losardo”, aunque será “más confrontativo, más áspero”. “Es la línea política del Presidente”, dicen en la mesa de Fernández, y afirman que el primer mandatario “no quiere un operador judicial”, al estilo Javier Fernández, sino que busca, con apoyo en el Congreso, “una reforma integral” de un Poder Judicial muy desprestigiado.

Por Gabriela Pepe- Letra P