Baires Para Todos

El “Virrey” de Chubut quiere conquistar la Patagonia para 2023

Sergio Massa, con el Frente Renovador como pivot, abre canales desde el oficialismo con un pool de fuerzas provinciales de Río Negro, Neuquén, Tierra del Fuego y Chubut.

En el año electoral que renovará el Congreso, el presidente de la Cámara de Diputados, socio mayor de la coalición de gobierno y principal figura del Frente Renovador, Sergio Massa, articula con referentes patagónicos de partidos provinciales un acercamiento más allá de lo coyuntural. Para buscar que se mejore el entendimiento con los gobernadores, la mayoría aliados a la Casa Rosada, afina la sintonía con los caudillos del sur. En una opción de largo aliento que no prohíbe ningún acuerdo electoral inmediato, avanza la relación con el Movimiento Popular Neuquino (MPN), Juntos Somos Río Negro (JSRN), Chubut al Frente y otras fuerzas que no son oficialismo en sus distritos.

Los nexos son los principales armadores de esos espacios. Jorge Sapag (MPN) y Alberto Weretilneck (JSRN) entran en ese esquema que se empezó a aceitar en el Congreso a través de los diputados Alma “Chani” Sapag y Luis Di Giácomo, quienes integran el bloque federal del mendocino José Luis Ramón.

En el caso de Chubut, el estrecho vínculo del tigrense con el gobernador Mariano Arcioni quedó grabado la noche en que el mandatario logró su reelección. Massa viajó al sur para participar de los festejos y desde allí, en vivo y en directo por televisión, recibió la invitación del entonces precandidato presidencial Alberto Fernández para tomar el café definitivo que iba a sellar el Frente de Todos. Arcioni fue el testigo presencial de aquella comunicación.

Para los neuquinos, el diálogo con Massa no es nuevo. En su aventura presidencial, en 2015, mientras Sapag y el hoy gobernador Omar Gutiérrez defendían la postulación de Daniel Scioli, el petrolero Guillermo Pereyra lo apuntaló en la región. No obstante, sin importar el contexto, la relación de la familia Sapag con el mentor del Frente Renovador siempre fue buena. El pacto se originó por el desplante del fallecido Horacio “Pechi” Quiroga, que volcó todo el aparato de la capital a favor de la candidatura de Mauricio Macri.

De su equipo en Neuquén sobrevive Carlos Sánchez, actual legislador provincial. En estos días, el diputado tendrá una charla con Massa para analizar el presente del sector que quedó relegado en la región tras la creación del Frente de Todos.

Franquicia

En Río Negro, la situación es más compleja. Massa sostiene la relación con el diputado nacional Martín Soria, quien no logró llegar a la gobernación en 2019, pero preexiste un canal de comunicación con el hoy senador nacional Alberto Weretilneck. En el Alto Valle todavía se recuerda la edición de la Fiesta de la Manzana que sirvió iniciar un acuerdo con el hoy presidente de la Cámara de Diputados con miras al proyecto presidencial del FR.

La tropa de Weretilneck tuvo idas y vueltas con el massismo. La foto de 2014, en la que el exgobernador oficializó su salida del viejo Frente para la Victoria (FpV), fue uno de sus pasos por Tigre. La relación se enfrió por los amagues constantes del rionegrino. “Ya lo hablamos con Sergio, retomamos el diálogo”, dijo Weretilneck a unos días de asumir en el Congreso en 2019 y despejando dudas del presente.

“La relación es muy buena”, explicó a Letra P una fuente del massismo nacional. Esa sintonía, según advierten en Río Negro, puede generar un efecto con vistas a otras instancias electorales, pero no en 2021. “Iremos con candidatos propios”, repiten los voceros del senador respecto del oficialismo provincial.

Mientras, se abrió una franquicia del partido. El encargado de darle forma es el legislador provincial Alejandro Ramos Mejía, quien renovó su banca con la lista que encabezó Soria y la titular del INAI, Magdalena Odarda. A mediados de 2020, anunció que pretendía sentarse en la discusión del Frente de Todos rionegrino. Para eso, sumó a viejos referentes de la avenida del medio como Claudio Thieck, que por estos días se desempeña como delegado de la CNRT en la provincia.

Un dato no menor es el rol que juegan los sindicatos. Letra P contó la excelente relación entre una de las cabezas de la CGT, Héctor Daer, y la gobernadora Arabela Carreras. Por expreso pedido del presidente Alberto Fernández, el jefe de Sanidad articula y mantiene un fluido contacto con la patagónica en nombre de la Casa Rosada. Daer, además de su rol gremial, fue uno de los que acompañó a Massa en su aventura lejos del kirchnerismo allá por 2013 y ocupó una banca en la cámara baja dentro del bloque del Frente Renovador.

Amigos

Chubut es un caso especial. Allí donde Massa tiene línea directa con el Ejecutivo provincial, la bomba de tiempo económica golpea al gobernador amigo. Los índices en rojo de una crisis de arrastre y el extendido rechazo al proyecto de zonificación minera que Arcioni no consiguió imponer en la Legislatura son algunos de los incendios que enfrenta la gestión de Chubut al frente.

Como si fuera poco, la iniciativa minera agitó todavía más la interna del Partido Justicialista (PJ) local, que se plantó como uno de los objetores del proyecto mientras discute las candidaturas para las elecciones legislativas.

Por otra parte, se da una paradoja. En Chubut, el Frente de Todos no existe como tal: el PJ es oposición provincial pero la alianza gobernante está alineada con la Casa Rosada vía Massa. Este intríngulis ya habilitó el regreso al partido de los peronistas que habían emigrado para subirse en 2019 al carro de Arcioni, quien no tiene reelección en 2023. Uno de los dirigentes que retornó al PJ es, ni más ni menos, el vicegobernador Ricardo Sastre.

Más al sur en el mapa, en el massismo se especula con incorporar al Movimiento Popular Fueguino, en una provincia donde las tribus panperonistas conviven entre recelos. En Tierra del Fuego gobierna el radical K Gustavo Melella. Enfrente se muestra el intendente de Ushuaia, Walter Vuoto, dirigente de La Cámpora que se alzó con la presidencia del PJ con vistas al futuro. Según trasciende desde la provincia más austral, se prepara para competir por la Gobernación.

Por Ariel Boffelli – Letra P