Baires Para Todos

El desembarco de Ibarra en Jefatura de Gabinete aumento la tensión con Marcos Peña

El vicejefe habla directo con Macri y genera recelos. Las versiones del banco de suplentes

La supervivencia de Marcos Peña en la jefatura de gabinete no le salió gratis: ahora disputa espacios de poder con su vicejefe, Andrés Ibarra.

Ibarra reemplazó en funciones a Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, que habían llegado a la gestión por obra de Horacio Rodríguez Larreta y el propio Macri. Los “Ceos” se acoplaron rápidamente al estilo de Peña, aunque tuvieron roces cuando osaron puentear al jefe de gabinete en el trato con el presidente.

Los ex vicejefes fueron conociendo el funcionamiento del PRO y el sistema de poder de Macri a medida que avanzaron los meses en el Ejecutivo. Con Ibarra pasa algo muy diferente: trabaja junto a Macri hace décadas, aún antes de que el presidente conociera a Peña.

Ibarra es un estrecho colaborador de Macri desde la época del Grupo Socma y tuvo importantes funciones en Boca cuando el Jefe de Estado presidía el club. El actual vicejefe de gabinete fue gerente general y gerente de Marketing en Boca e incluso es una carta del presidente para suceder a Daniel Angelici, que deberá dejar el club xeneize en 2019 tras dos mandatos consecutivos.

Tras nombrarlo en diversos cargos en la Ciudad, Macri le confió a Ibarra el ajuste de la planta de empleados públicos una vez que llegó a la Rosada. Y en su fin de semana más crítico, en las primeras horas de septiembre y cuando incluso algún ministro le sugirió que renunciara, Macri se aferró a Ibarra para desarmar el tridente de jefatura de gabinete.

Ese fin de semana, en el que el gabinete se achicó a la mitad y varios ministros pasaron a ser “secretarios de gobierno”, Ibarra se ufanaba de ser el único funcionario que había sido ascendido: de ministro pasó a ser vicejefe. Incluso tuvo un intercambio con el propio Peña: “Vos no entregaste nada, Quintana y Lopetegui no eran tuyos”, lo cruzó.

Como sello distintivo de sus predecesores, Ibarra no pasa las horas a metros del despacho de Marcos en la Rosada sino que reparte su agenda con su oficina del extinto ministerio de Modernización de Diagonal Norte, ubicado enfrente de la Catedral Metropolitana.

Como le sucede a cada persona de confianza y diálogo directo con Macri, Ibarra genera celos en Peña. Algo similar le sucede a Nicolás “Nicky” Caputo, el mejor amigo del presidente. Por ese motivo, Ibarra y Peña siempre se llevaron mal y la desconfianza es mutua.

Macri, que parece disfrutar la discordia entre sus propios subordinados, sabe de esas diferencias entre Peña e Ibarra. Y no faltan quienes sostienen que puso al ex ministro de Modernización a elongar en el banco de suplentes cuando lo nombró vicejefe: qué mejor lugar para aprender el funcionamiento de la jefatura de gabinete en silencio.

Fuente:LPO